Título original: Bakeneko Anzu-chan
País: Japón
Año: 2024
Directores: Kuno Yôko y Yabashita Nobuhiro
Estudio: Shin-Ei Animation y Miyu
Estreno: 21 de febrero, 2025
Edad: +12

Siguiendo con la parrilla del programa de SITGES 2024, nos encontramos con un largometraje de estilo anime japonés, con algunas peculiaridades.

Gatos, duelo, Miyazaki y Totora. Estos son los cuatro sustantivos que definen la película de “Bake neko Anzu-chan”. Una película estilo anime dirigida por Kuno Yôko y Yabashita Nobuhiro y producida por los estudios Shin-Ei Animation (conocido por producir gran parte de los largometrajes del personaje Shin-chan) y Miyu.

Jugando con el uso de la animación en rotoscopia (una técnica que comienza a verse con más frecuencia en las producciones japonesas de estilo anime) la película nos narra la historia de Karin, una niña de 11 años quien se queda a cargo de su abuelo mientras su padre soluciona problemas financieros. En el templo de su abuelo conoce a Anzu, el gato fantasma de la familia de aspecto antropomorfo y carácter frío pero protector, viviendo con él una aventura que la lleva a conocer a muchos de los demonios y espíritus más conocidos del folklore japonés.

La película cuenta con una premisa interesante como es el trato del duelo y la adaptación en la infancia a través de un mundo de fantasía como podemos encontrar en Mi vecino Totoro (1988)donde Miyazaki hace una extraordinaria radiografía de los cambios en una familia que se enfrenta a la enfermedad, la muerte y el habituarse a un entorno nuevo en el que vivirán. Sin embargo, Bake neko Anzu-chan parece quedarse en su superficie. Ya que, si bien es cierto que se nos va relatando paulatinamente los sucesos pasados por los que la protagonista actúa como lo hace, no se consigue transmitir un ejercicio de reflexión y cambio tan complejos.

Fotograma de la película Bakeneko Anzu-chan, 2024.

El gato Anzu y los animales y seres mitológicos ocupan gran parte de secuencias y planos en la película, y esto genera una confusión con respecto a quién pretende ser el canal de la conversación. Un conflicto que no resuelve dando demasiado protagonismo a momentos anecdóticos para la trama y un tratamiento de los personajes mal planteado desde el guión. Como el uso de gags cómicos de sonidos y gestos procedentes del gato, colocados para generar simpatía con los espectadores más pequeños, pero que no funcionan para profundizar en el personaje. 

Fotograma de la película Bakeneko Anzu-chan, 2024.

En el caso de Karin, su carácter está marcado por una intrínseca soledad y aislamiento a consecuencia de la pérdida de su madre. Un evidente tema a tratar en compañía de la fantasía que pudiese permitirle despedirse de su duelo y convivir con él a su corta edad. Sin embargo, la falta de diálogo y el abandono repentino de la figura paterna, junto con un abuelo casi inexistente, son elementos que no tienen justificación dentro de la trama y que sin embargo se nos introducen al inicio del filme.

Fotograma de la película Bakeneko Anzu-chan, 2024.

Otro fallo desde la decisión en la dirección es subestimar la animación en rotoscopia y la falta de atención en la captación de sonido. Tratándose de animación, es necesario un doblaje dentro del estudio, ya que el diálogo en acción real choca con el formato. Además de que rebaja la calidad del visionado, llevando a confusiones y al uso de los “silencios” más propios del cine de acción real y que no llegan a a encajar con la atmósfera de la película. Resultando en un intento de propuesta entre convencional infantil y de autor.

Es por esto que el largometraje queda en una anécdota divertida, pero simplista. Una lástima para unos directores y una premisa que podrían haber funcionado mejor de cómo se ha resuelto, perdiéndose en las formas de su rodaje en rotoscopia que ha generado más confusión que claridad.

Calificación Animatic

Calificación: 2 estrellas

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